Dicen que la sociedad española en general no se queja. Que somos pasivos y que somos más de rajar sobre lo que no nos gusta con nuestra familia, nuestros amigos o nuestra pareja y que no ponemos soluciones legales como reclamaciones o quejas formales. Siempre se nos compara con las sociedades del norte; ya sabes, Noruega, Suecia, Dinamarca, Finlandia…¡¡Qué se yo!! Que si son más productivos, que si son más rubios, más altos, con los ojos más azules, saben más inglés, son más inteligentes y si, ponen más quejas formales.
Pues bien, voy a dar ejemplo y voy a quejarme. ¡¡No hay chicos guapos en la tele!!
Esto, que parece una frivolidad a priori, no lo es en absoluto.
Resulta que los hombres que salen en televisión, en programas de éxito y con índices de audiencia muy elevados (y no son gays), están muy lejos de ser sex simbols.
Si no os lo creéis, hagamos un repaso por la parrilla televisiva: Pablo Motos (El Hormiguero) y todos sus colaboradores empezando por Marron y acabando por Jandro, El Gran Wyoming (El Intermedio), Flo (Toterías las Justas), Andreu Buenafuente (Buenafuente), Jordi González (La Noria), Miki Nadal (Se lo que Hicisteis…) y así muchos más, pero no me quiero extender.
No es que a mi me importe, y el tema no tendría mayor transcendencia de no ser porque para ser mujer-presentadora tienes que ser un cañón. ¿Necesitáis ejemplos? La redacción al completo de las Noticias de La Sexta, todas las presentadoras del Se lo que Hicisteis…, Anna Simón, co-presentadora de Tonterías las Justas así como la colaboradora Romina Belluscio (modelo y miss Argentina), Beatriz Montañez y Usun Yoon, ambas de El Intermedio, etecé, etecé y, aunque me alegro mucho por ellas de que Dios se recreara en el momento de su creación, resulta que no me parece justo.
Si eres hombre y quieres salir en la tele te basta con ser bueno en lo que haces, o intentarlo porque no todos lo consiguen. Pero para ser presentadora tienes que ser guapa y tener un escotazo del quince, tienes que estar tremenda y servir para enganchar al público masculino. Luchamos por una sociedad que huya de los estereotipos y de la discriminación a la mujer. Luchamos porque nuestros esfuerzos se recompensen de la misma manera que los del hombre pero resulta que, día tras día, el medio más masivo que hay nos bombardea con la idea de que, si una mujer quiere triunfar, tiene que ser despampanante sin importar su currículum.
¿En la televisión no hay espacio para las feas? A, bueno, ahora que caigo, si que hay una oportunidad para ellas: Gran Hermano, ahí cabe todo.