"Distracción" de un lunes por la tarde

Estoy en un gran embrollo. Mañana, martes 6 de septiembre, es el día que da pistoletazo de salida al periodo de matricula para este curso en la universidad -si, sigo yendo a la universidad porque el saber no ocupa lugar y porque el tema está demasiado mal como para dejar la formación de lado-. El tema es que, tras años y años usando el mismo modus operandi, el que consiste en asignar horarios en función de una letra del Carné de Identidad y ya, este año el sistema cambia.
Para este bello curso 2011-2012 los responsables de la universidad han decidido que todos somos libres de hacernos nuestros propios horarios y, ¡menudo lío!
Resulta que las asignaturas optativas que he escogido de ante mano a la matriculación -soy muy previsora, ya veis- no me coinciden con ninguno de los horarios (cuatro, nada mnás y nada menos señores) de los que propone la universidad y, ahora, en embrollo me hayo.
Mi dilema principal es, o bien me hago un horario relajado en el que me dejo fuera la mitad de las asignaturas, o bien aprieto como puedo el día para poder amontonar asignaturas y....menudas asiganturas!
Si quiero que me encajen en mi horario tienen que ser coñazos de tamaño mayúsculo, porque las buenas no me caben en mi jodido horario.

En fin, esta tarde me toca estar frente a seis papeles e internar jugar con las asignaturas y hacer las máximas combinaciones posibles antes de las 12 de la noche porque esa, amigos, es la hora bruja.  A las doce se abre el plazo de inscripción y todos, cuan aves rapaces, se avalanzarán sobre sus ordenadores para intentar "cazar" el mejor horario. Y yo, que me lo veo venir, me quedaré con los restos, las asiganturas que se cursan los lunes a las 8 de la mañana y los viernes a las 21 de la noche porque yo soy así, soy una pringada....
Uffff que tarde más dura se me espera....